jueves, 30 de agosto de 2007

Practicantes no hay camino

Sí a las prácticas, aunque no sean remuneradas. No a las suplencias veraniegas encubiertas. Lo que en el mundo del periodismo se conoce como “hacer prácticas” es una práctica nada práctica para el practicante. Resulta que una está más verde que una lima y va con la ilusión de aprender, de nutrirse de la experiencia de grandísimos profesionales, de ser tutelada y resulta que cuando desembarca se encuentra en medio de una redacción que parece más bien un campo de batalla en pleno fragor del combate y claro, allí no encuentras a nadie que te dé la mínima indicación y de pronto te das cuenta que tú estás allí para sustituir a alguien que se ha ido de vacaciones y se espera de ti que seas tan operativa, o más, que la persona a la que has ido a cubrir. Aprendes a base de golpes y francamente, creo que hay mejores maneras de formar a la gente. Hablo del mundo del periodismo, que es el único en el que he hecho prácticas los cinco años de mi vida estudiantil, verano e invierno, y solo percibí un pequeño donativo en las prácticas de fin de carrera. Después de eso nunca más práctiqué, ejercí. Fui novata muchas veces y aprendí pero no era la sustituta de nadie. Tenía existencia propia ¡y nómina! Era una igual. Ahora ya no practico el periodismo profesionalmente. Escribo por gusto y sin ánimo de lucro y lo mejor de todo, sobre lo que me invade. Nadie me dicta, solo mi corazón y en él,la actualidad no prima. Ya no soy miembro de la tribu pero en la caída me he llevado muchos logros y aciertos: he viajado mucho, he vivido fuera y ahora, gracias a tantas idas tengo un trabajo que me permite pagarme mi casa, mis gastos, mis estudios. Trabajo para vivir y sigo en la búsqueda de la realización profesional, he vuelto a estudiar y quiero emprender nuevos rumbos. No sé qué me depara el camino porque todavía no existe, lo que sí sé es que no creo en la explotación disfrazada de oportunidad. Creo en el esfuerzo y en el sacrificio porque en esta vida no te dan nada “de gratis” pero creo en la justicia social. Aprendizaje sí, explotación no. ¿Hasta cuándo seguiremos aguantando? Naranjas, lacayos fieles y entusiastas que nos vamos dejando extraer hasta el último aliento.

Lo he publicado hoy en http://blogs.cadenaser.com/diario_de_clara/2007/08/exprimidos.html?cid=81097563#comment-81097563

No hay comentarios: