viernes, 4 de abril de 2008

Cadena perpetua

Lleva años queriendo cerrar el círculo, completar el puzzle, acabar el rompecabezas. No es fácil, a veces está claro lo que falta, otras veces la visión se diluye como cuando una hoja cae en el agua y hace desaparecer su reflejo. Y aunque le han dicho que lo que busca no existe, se aferra a lo inalcanzable como la única esperanza que le queda para no sentir que su vida sólo es un cúmulo de fechas y vivencias sin trascendencia.

Ella no es la única que corre en esta carrera sin meta. Se rodea de constantes insatisfechos e insatisfechas, incapaces de sentirse llenos y llenas con nada, que se entregan en cuerpo y alma a esta eterna búsqueda. Vivir en la duda continua, en el desasosiego, en el dilema, encogerse de hombros por defecto y tener constantemente un no sé pegado en los labios son los peajes de este viaje hacia la perfección. Pero, ¿existe?

3 comentarios:

Carolina Pera dijo...

A perfeição depende dos olhos de quem vê!
é o Brasil visitando seu Blog! Tá ai, gostei muito do blog, sempre que possivél, visitarei!
Hasta!

Anita Baker dijo...

¡y qué más da la perfección! ¡Viva la imperfección! Qué aburrido sería todo perfecto

Lady Sullivan dijo...

Me encanta, Men! Es hermoso.